La frase es de Camilo Blajaquis, poeta villero, ex preso, antes pibe chorro y ahora estudiante de letras. Está en la entrevista que le hizo Silvina Friera en Página/12 de hoy.
La frase es de Camilo Blajaquis, poeta villero, ex preso, antes pibe chorro y ahora estudiante de letras. Está en la entrevista que le hizo Silvina Friera en Página/12 de hoy.