Este es el título de la entrevista publicada en Cerdos & Peces de mayo de 1987 que recuerdo como mi primera aproximación al discurso de Néstor Sánchez. La reviso mientras preparo (incluyo, descarto, reedito) una selección de mis artículos de aquellos años que con suerte se publicaría en este: Cerdos & Porteños. De esa entrevista sale la paráfrasis con la que Pablo Chacón titula esta nota que hizo para Télam:
T : ¿Por qué te llamó tanto la atención Néstor Sánchez? Supongo que no discriminaste entre su figura y su obra.
B : Al contrario, desde el principio hubo una discriminación precisa entre figura y obra. A menos que se incluyan las entrevistas que el autor concedió como parte de su obra. Pero antes de haber leído sus novelas, lo primero que recuerdo de Sánchez es lo que dijo en los 80 en una entrevista en Cerdos & Peces, revista en la que yo colaboraba, acerca de lo que él llamaba el camino lumpen, una supuesta conducta pretérita, un tao de arrabal cuyos códigos eran no hacer carrera, no hacer periodismo, no hacer publicidad, no buscar premios literarios. Esos enunciados con los que Sánchez aportaba material para construir su figura de escritor fueron mi punto de partida. Me llamaron la atención sus gestos de fuga, deserción y abandono del mercado editorial, de los nichos culturales y en última instancia, de la vida civilizada, convencional, urbana, productiva y domesticada. Esos gestos de buscador espiritual, de linyera ilustrado, de lumpen en el sentido de alguien que vive en el peligro, al acecho, en actitud contraria al confort y a la vanidad del éxito social. O sea, alguien contrario al escritor en permanencia, al escritor profesional. Luego, en algún momento en la escritura de mi libro conjeturé que pueden encontrarse las pistas de ese ademán de abandono dentro de sus novelas y sobre todo en su experimentación con el free-jazz, pero al final decidí que ese relevamiento no era mi objetivo y así, de alguna manera, volví a separar figura y obra.
T : ¿En qué momento decidiste ese giro por el cual también empezaste a escribir sobre vos?
B : En el momento en que advertí que el centro, el núcleo de la vida vagabunda de Sánchez en los más de diez años en los que estuvo desaparecido, me resultaban inaccesibles. Y que alguien que quisiera escribir una biografía debería vérselas con esos años oscuros y que contienen el enigma de una vida. Lo único que podía hacer ante esa opacidad era cotejar y comparar las huellas dispersas del viaje de Sánchez con mis propias memorias de encuentros en mis periplos por Europa y América del Norte, con personas que estaban en búsquedas semejantes. Por eso no escribí una biografía ni un ensayo sino lo que podría llamarse una auto-transbiografía en cruza con una novela isleña que colapsa y renuncia a tener completud, remate o consumación. Continuar leyendo «Néstor Sánchez: «Para ser lumpen hay que tener conducta»»